Imagen: Jesús Hernández - Elche CF
El Elche CF sobrevivió en San Marcos en una noche que tuvo más de épica que de autoridad. El Quintanar del Rey, empujado por un estadio entregado y por la ilusión de una cita histórica, llevó al límite a un rival de dos categorías superiores y firmó una actuación que rozó la heroicidad. El partido comenzó con un Elche dominador pero sin colmillo, incapaz de convertir la posesión en ocasiones claras, mientras el conjunto castellano-manchego se plantaba con orden y buscaba transiciones rápidas que, por momentos, inquietaron más de lo previsto.
El primer gol franjiverde llegó al inicio de la segunda parte, cuando Ali Houary, en el minuto 48 del encuentro, firmó el 0-1 con un disparo fuerte y ajustado a la escuadra de la portería rival. A partir de ahí parecía que el encuentro se encarrilaba, pero los de Eder Sarabia dieron un paso atrás y el Quintanar, lejos de rendirse, creció. El empate llegó a los 70 minutos tras un error en la salida del balón que Eric Iglesias castigó y mandó la pelota al fondo de la red, desatando una ovación atronadora en las gradas. El gol liberó a los locales, que incluso estrellaron un balón en el palo y obligaron al Elche a defenderse con urgencias impropias de un equipo de su nivel. Con este resultado de 1-1 el partido se marcharía a la prórroga.
La prórroga fue un ejercicio de resistencia física y emocional. El Elche empujó más, obligado por la presión y por la necesidad de querer evitar los penaltis, pero los locales seguían creyendo en la gesta. Solo a falta de tres minutos para el final llegó el desenlace. Héctor Fort, que había ingresado en el segundo tiempo, enganchó un disparo cruzado desde un ángulo complicado para firmar el 1-2 que silenció a San Marcos y devolvió el aire al cuadro ilicitano. El tanto cayó como un mazazo para un Quintanar al que ya le faltaban fuerzas, pero no orgullo.
El Elche CF cumplió con la obligación de pasar y ya está entre los 32 mejores equipos del torneo, lo que le da acceso a los dieciseisavos de final de la Copa del Rey. Allí busca rival a la espera del sorteo del 9 de diciembre, en una eliminatoria que se disputará los días 16, 17 o 18 de enero de 2026. El CD Quintanar del Rey, por su parte, se marchó entre aplausos, consciente de haber estado a un pequeño paso de una de las grandes sorpresas del torneo. Fue una eliminatoria que recordó por qué esta Copa sigue siendo territorio de sueños, sufrimiento y noches inolvidables para los modestos.
